Reborn

Sinceramente no sabía que hacer solo me deje llevar por el dolor que sentía y viví esos días con todo mi pesar. Cuando llega mi cumpleaños y la época de muertos - Navidad, especialmente no son de mi agrado esos días. Estos días han sido muy difíciles, sino que de los más fuertes que he experimentado. Sobre todo por qué no podía caerme al grado de deprimirme, me aferre a lo que podía. No caí pero si me rompí. 

Me reconstruí desde lo más profundo. Desde ver fotografías, esas personas que se fueron, sus pláticas o lo que había pasado en ese día. Recordé mucho a mi niño interior, hice contacto con él. Llegaron demasiados recuerdos de golpe, claramente lloré demasiado. Mi cabeza dolía de tanto que lo hacía. 

Llegaron esos momentos, esas pláticas, esas situaciones que me marcaron desde muy pequeño. Pensaba para mí, ya se fue mi tío el que me enseñó todo de grande y se fue ahora quien me vio desde bebé, aunque no fuera mi padre, fue como tener alguien que no solo fuera la figura masculina, sino quien me enseñó desde pequeño. A pesar de sus carencias me transmitió su conocimiento, me dio y me vio cuando nadie más lo hizo. Y por sobre todo, jugó conmigo, cosa que nadie más lo había hecho.

Escuché canciones viejas, canciones que tantas veces las vi bailar con mis tíos, sus bailes, sus risas, que aunque estuvieran tomados, eran buenas personas. Fue como una sobre saturación de imágenes en mi mente. Estaba enojado, triste, nostálgico, vacío. No tenía hambre, comía poco, solo lo que me pedía mi cuerpo para poder aguantar. Seguí entrenando pero pasaba rápido el tiempo y no había algo más allá. Dolía el cuerpo pero, aunque ya es normal ese dolor, por las noches solo quería dormir. Soñé demasiadas cosas. Dormía aún menos y fue aún más el cansancio. 

Trabaje inconscientemente con mi inconsciente, valga la redundancia. El comer poco, dormir casi nada, recordar y tener un momento de transición, volví a abrir viejas heridas que creía que había superado en el AA, ya vi que aún no. Que tengo que seguir trabajando. 

Tuve presente al final de todo esto el dicho "No se hacia donde voy, pero si se de donde vengo". Recordé quien era, mis pensamientos de niño, lo que quería ser y como era. El estar solo y convivir solo con mis papás. Me acerque a ellos y compartimos ese dolor. Más con mi mamá, mi papá volvió a irse con su familia. No es que haya dolido, pero desde hace años me hacía falta ese papá, hoy no fue la excepción. Pero tuve a mi mamá que me dejó estar en mi proceso. Y sin más empecé a reconstruirme, a tener contacto con mi yo pasado y tener presente todo lo que yo era. El darlo todo por los demás, solo que está vez ya no con todos. Mucha gente se aprovecha de eso y te exprime mientras le sirvas, cuando no, solo te hacen a un lado. 

Mi enojo se tranquilizó, solo deje fluir y me enfoco realmente en quienes son importantes para mí. Me llegó a importar lo que pensaran de mí, tener que ayudar a todo quien viniera a mi y ofrecer ayuda sin decir no. 

He vuelto a mis redes sociales, y aunque sé que tengo claro quien soy, pero si cambio mi perspectiva del mundo y de las personas que me rodean. Sé que cuando me muera solo estarán ellos, mi familia. Corroboró una vez más que no tengo amigos y no pienso abrirme con nadie, tengo pocas personas y con ellas me quedo. Sonará orgulloso y egoísta, lo sé. Pero entendí que no hay que quedar bien con todos, también es bueno. Importa solamente lo que pienses tú mismo. Realmente valgo mucho, por quien soy, lo que sé y por quienes me rodean. Soy quien soy y eso es lo que importa.

Escuché un vídeo, "Levanta el culo y espabila, échale huevos por qué de eso se trata, arriba gilipollas, no has dado ni el 10% de tu potencial". Y aunque suene cursi o que son cosas que yo sabía, era como si me lo dijeran específicamente a mi. Me calaron y me levanté, pensaba para mí "soy el puto mejor". Y sin más una vez más estamos por aquí.

He escrito demasiado, pronto iré soltando más entradas por aquí. Mientras respiro hondo, calmo los latidos de mi corazón y hago lo mejor que sé.

Sé que mi niño estaría orgulloso de todo lo que sabemos hacer. Sobre todo que somos tan grandes y aunque estuvo solo tanto tiempo. Hay personas que se quedaron con nosotros. Que nos procuran y nos abrazan. Y con eso es con lo que me quedo y a lo que me aferró.

Solo tengo mi fe, un día a la vez.

De las cenizas, como el ave fénix.