Fin de año

Jueves 31 de Diciembre del 2020.

Siendo las 5:06 p.m.

Desde ayer en la tarde ando sacado de onda, me siento nostálgico y a la vez triste. Mis papás me dijeron que mi Padrino Bernardo está hospitalizado, recién estaba enfermo de gripe y justamente ayer su hija lo llevó al hospital en Texcoco. Estaba mal y sigue estando así. Hoy en la tarde le llamaron a mi papá para decirle que ya lo entubaron. Es el hermano de él, mi Padrino, mi tío y una de las pocas personas que me vio durante mi infancia.

Llegan los recuerdos a mi mente, resuena su voz en mi cabeza. Todas las veces que jugó basquetbol conmigo aunque no tuviera la mínima idea de cómo se jugaba, las veces en que recibía su tanda y nos daba, a mi hermana y a mi $5 a cada uno, Dios sabe que me sentía millonario con esa moneda, era demasiado dinero para mí.

Vienen momentos con el, las veces que salíamos los domingos mi papá, el y yo a jugar fútbol. Mi afición por el equipo América por qué mi papá y el le iban. Recuerdo una vez que le pidió permiso a mi mamá de llevarnos con él. No sabía dónde solo que fuimos mi hermana y yo, sin dinero, sin nada. Solo a las expectativas. 

Nos llevó al mercado de San Juan, recuerdo ese día por qué nos compró un cóctel de camarones. Mi Madrina me preguntó si mi mamá nos había dado dinero, claramente no había dinero y menos para comprar si quiera algo así. El no dijo nada y nos compró un "Vuelve a la vida" para nosotros dos. ¿Has sentido un sabor en tu boca que al día de hoy logras recordar después de tantos años?. Lo tengo en mi memoria y en mi boca, ese recuerdo se lo debo a él.

Llegó a vislumbrar recuerdos más pasados, las veces en las que mi papá me cargaba en sus hombros y como salíamos con el, se turnaban para cargarme en sus hombros. Y ahí una yo, un niño de 3-4 años, de 1 metro y poco más de estatura sobre los hombros de ellos. Logro recordar esa vista, me sentía tan grande, tan protegido por ellos. 

Viene a mi mente una ocasión en la que siendo Navidad hubo intercambio y ese año en especial yo tenía cierta afición por los X-Men, habían salido los juguetes de la película, mi mamá me había comprado a Wolverine, jugaba con el todo el tiempo, continuó Dientes de Sable y otro Wolverine más. Y en ese intercambio nos compró juguetes a nosotros, me compro al Profesor Xavier. Ya lograrás darte una idea de cómo me la pasé esa Navidad. 

Entre recuerdos de el, de mis tíos que fallecieron, de la familia que ya no está, de la gente que se ha ido. He estado escuchando canciones que me recuerdan mi infancia, canciones viejas, si se le pueden llamar así, como si ellos pudieran escucharlos. Ayer hice oración y estaban presentes. Procuro ocuparme por la gente que aún sigue, y lo hago, les doy lo mejor de mi.

Solo que a veces es grande la carga que uno lleva consigo, he pensado en ir en hacer mi segunda escritura. En volver al AA para poder sacar aún más cosas, solo que de momento las pláticas con mi mamá y mi familia son las que me están ayudando. Por insignificantes que sean las valoro mucho. Ese abrazo, ese trabajar juntos, el convivir, el escuchar música juntos, el saber que estarán ahí para mí y estaré para ellos. 

Diría un poema que escuché hace años: "Hay pocas cosas que necesito en esta vida, pero las pocas cosas que necesito, las necesito y demasiado". 

Solo quise escribir, no es mucho y nada en especial. Solo quise vaciar un poco mi mente. Sólo eso.

Arriba Jos, aún falta y te necesitan fuerte.

Kame-House.